¿Una Nueva Oportunidad?

 

Dios, si lees esto: 

Espero que lo que he estado haciendo desde diciembre del año pasado, sea lo que realmente quieres para mí. Que la mujer que por enésima vez me pusiste en el camino, sea realmente la indicada para mí y que esta vez las cosas resulten como tengan que resultar.

Tengo claro que hay cosas que quedaron en el tintero la vez anterior y que deben decirse para dejar el tema zanjado de una vez y comenzar a escribir un nuevo libro de nuestras vidas. Se que hay cosas en ella que aún tiene que corregir y yo también tengo que corregir las mías. 

Que la impaciencia y la excesiva necesidad de vernos no destruya el plan que tienes para nosotros, que los errores y las heridas causadas por las acciones del pasado sean solo un aprendizaje y que cultivemos la paciencia, que las cosas se den a tus tiempos, ni a los míos ni a los de ella. 

Sabes bien que el tiempo que he estado en solitario, curando las heridas, me ha hecho olvidar algunas cosas como la caballerosidad y la galantería, la delicadeza y el detallismo. Por favor, recuérdamelas y obligame a ponerlas en práctica.

Tu sabes que ambos estamos con vidas separadas y mundos aparte. Ella tiene una relación rota y yo tengo a alguien a quien tengo que cuidar por ahora. Que nuestras juntas sean racionales y que la ansiedad de estar juntos no nos joda la antesala a los momentos felices. Tu dispones de nuestros tiempos y espacios, ayúdanos a poder coordinar y coincidir para tener momentos felices. Si uno de los dos no puede, que el otro no empiece a estrilar. 

Ayúdame a comprenderla más y a ella ayudala a que entienda que hay cosas que uno tiene que hacer y por ende aprender que postergarse no es malo. 

Haz que nuestros días coincidan para vernos. Y que los momentos sean los mas lindos aunque sean breves. Que nuestro imperio se construya ladrillo a ladrillo.

Dios, si este es tu plan, confirmalo. Si no, dimelo también, pero directo a la cara, nada de acertijos, ni mensajes crípticos ni tampoco esa weá de leer entre lineas ni adivinar nada. Sabes que ya no tengo cabeza para entender lo que no puedo. Hablame no en tu idioma, sino que en el mio para poder entenderte. Recuerda que soy humano y duras penas entiendo mi cabeza.

Atte. Un Enamorado.