lunes, 11 de noviembre de 2019

No Fate

El hecho de ver Terminator: Dark Fate, los eventos que actualmente ocurren en mi país me han hecho pensar una cosa: Nada es certero, todo es incierto, no hay destino.

Un dia tienes todo, al siguiente todo se viene abajo. Lo que conocías desaparece y un nuevo mundo aparece ante tus ojos. Tienes miedo, ves con impotencia como el mundo se viene abajo: desordenes, saqueos, violencia, la policia sobrepasada... Dios, no puedes hacer nada por ahora, solo te llenas de bronca y odio, la rabia por ver como unos pocos destruyen el mundo que conocemos, movidos por la avaricia, la codicia y el resentimiento de otros que los usan de tontos útiles. Los usan solo para un solo fin: LLEGAR AL PODER, para despues desecharlos y someternos a su tiranía. Empiezas a entender que muchas cosas que veías solo en videojuegos y películas se estaban volviendo reales. Lo que veías en los noticieros internacionales, que jamás creíste que volverían a pasar, vuelven a golpear tu puerta. Ves a las jaurías destruir todo a su paso, a las policias incapacitadas para reaccionar, ver que ya no puedes comprar lo que solías hacer con total libertad, ya no puedes desplazarte con seguridad, ya no tienes nada, pues todo lo que tenías y creías se vino abajo, aplastados por esas jaurias que iban con un "ideal de un mundo mejor" que en el fondo era simplemente servir a sus amos... ¿que viene después?

Es entonces cuando piensas en practicar, en aprender de armas, combate cuerpo a cuerpo, dejas tu zona de confort y te das cuenta que todo lo que has aprendido sobre armas, combate y afines tendría al fin una utilidad, una razón de ser. No es que seas un "loco por las armas", ni tampoco un "milico frustrado". Estaba preparandome para algo así. Todo lo que conozco sobre eso, valió la pena. Airsoft era solo una ligera preparación, como una introducción. Aprender viendo YouTube de quienes enseñan a manejar de manera táctica, combate con cuchillos, funde y desenfunde rápido, tacticas de combate, uso de armas, defensa personal, horas y horas aprendiendo..
. Todo eso valió la pena aprenderlo... ¿pero valdrá la pena ponerlo en práctica?

No hay destino, solo lo que hacemos, un día a la vez.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario